Posiblemente has escuchado una que otra vez, que el comer menos calorías; no solo ayuda a la producción de pequeñas dosis de grasa en el organismo, sino que también prolonga la vida puesto que se mantienen los niveles de presión y bombeo sanguíneo, totalmente balanceados; lo cual es más que cierto.
Son muchos expertos los que denominan a este proceso restricción calórica, un concepto que nos habla sobre la reducción de tales nutrientes, sin caer en la malnutrición alimentaria, planteándole también como un hábito que puede contribuir a proteger las células de los efectos del estrés oxidativo.
Ahora, si bien ingerir menos calorías no significa un retraso total del envejecimiento, se puede decir; que se logra mejorar los ciclos de descomposición y síntesis de grasos; proveyendo una desintoxicación natural al cuerpo y extendiendo su tiempo de vida útil.
Entonces, ¿menos calorías más beneficios?
Sin duda alguna, al comer menos calorías; la longevidad puede ser bienvenida, ya que no solo implicaría un control de presión arterial; o regulación de colesterol y triglicéridos, sino que también ayudaría a mantenerse en un peso estable, eso sí; siempre brindándole al organismo la cantidad necesaria para convertirle energía, cual se estipula para mujeres en 1200 al día y en el hombre 1500.
Los beneficios de no comer calorías o restringir su consumo puede provocar mejorías increíbles en los estados de salud humana, pues el proceso oxidativo de los tejidos de nuestro cuerpo comienza a rentalizarse debido a la poca producción de radicales libres, es decir que mientras consumimos menos de estas, estamos fortaleciendo el área ósea, aumentando la producción del colágeno, optimizando la energía muscular e incluso rejuveneciendo las neuronas y células cerebrales.
No obstante y por si fuese poco, también se lograría reducir el grado de glucosa en la sangre; y se evitaría por completo la posibilidad de diabetes.
¿Cuál es la mejor forma para reducir su ingesta?
Comiendo todo bajo control, si queremos prolongar la vida; sin terminar en un estado de malnutrición por el bajo consumo de calorías, debemos tomar en cuenta que podemos incluir de todo en la dieta; pero con niveles restringidos; ya que lo ideal es consumir es alimentos ricos en carbohidratos; pero también fibras y proteínas para crear balance, evitando lo mayor posible; grasas animales y azúcares no refinados.
Por tal razón, es necesario que mantengas un control estricto de la ingesta alimentaria, leyendo a tabla de nutrientes de cada empaque antes de comprar; y creando un plan de dieta basado en proporciones adecuadas de cada nutriente para llevar a tus platos.
Solo así, se podrá controlar el consumo calórico, resguardar la estabilidad de organismo y mantener un bienestar en cada sistema del mismo, para disfrutar de una vida más longeva y saludable, sin descuidarte.