Detectar los tóxicos para eliminarlos
Son varios los órganos que están expuestos a una intoxicación por metales pesados. Entre ellos, el pulmón, el cerebro y los riñones. Estas sustancias se encuentran en múltiples productos y elementos con los que entramos en contacto a diario. Desde las pinturas de las paredes de las casas hasta el combustible con el que cargamos nuestros automóviles.
No es posible medir las concentraciones de metales pesados en cada órgano del cuerpo, pero sí podemos hacer una medición general a través del cabello y la piel. Por medio de esos resultados se infiere, de manera indirecta, si hay un riesgo de intoxicación con metales pesados.
Las sustancias que usualmente se miden son el mercurio, el cadmio, el plomo, el arsénico y el aluminio. Debido a que el cuero cabelludo es accesible para una muestra y el folículo piloso siempre está incorporando elementos en la creación de cabello, resulta un método sencillo, útil y preciso para conocer el nivel de intoxicación.
Advierte sobre el consumo elevado de pescados contaminados
Identifica causas ocultas de fatiga, depresión, impotencia sexual y enfermedades neurodegenerativas
Orienta el diagnóstico ante la presencia de síntomas inespecíficos
Ayuda a reconocer exposiciones cotidianas a elementos dañinos
¿Dónde puede obtener el test de metales pesados?
En Long Life Clinic disponemos de kits para realizar el test de metales pesados en el cabello. Con una modalidad práctica y sencilla será posible la realización del análisis completo.