Cuando los estrógenos están en niveles altos en las mujeres, aparecen síntomas asociados y hasta trastornos completos que constituyen síndromes patológicos. La detección de los mismos impone indagar la causa que origina el desbalance hormonal para recuperar la regulación normal.
Los estrógenos son hormonas sexuales que cumplen funciones variadas en el organismo, sin limitarse únicamente a los órganos genitales. La piel, el sistema cardiovascular, los huesos y el aparato urinario dependen de los niveles adecuados de estas sustancias para desempeñarse de manera correcta.
¿Qué son los estrógenos?
Como bien adelantamos, los estrógenos altos en las mujeres parten de una situación que, en principio, es normal, pero luego se desregula. Esto significa que, de manera natural, el ser humano cuenta con estas hormonas en su circulación sanguínea, en un estado de equilibrio que varía con la edad.
La fuente de producción está en los ovarios de la mujer y en las glándulas suprarrenales. Durante la etapa de fertilidad, antes de la menopausia, juegan un rol clave en el desarrollo de los caracteres sexuales secundarios, así como en la regularidad del ciclo menstrual.
Llegada la década de los 40 años, las mujeres comienzan a producir cada vez menos cantidad de la hormona. Eso es esperable y constituye el inicio del período menopáusico, durante el cual se terminarán los ciclos menstruales y, con ello, la fertilidad. A la par, el descenso en los valores séricos de estrógenos acarreará problemas típicos como los sofocos y la osteoporosis.
Por otro lado, durante la etapa de fertilidad, existe la posibilidad de que la hormona se eleve demasiado. Esto es el hiperestrogenismo o los estrógenos altos en la mujer; los efectos de ello son preocupantes.
Causas de los estrógenos altos en las mujeres
El desbalance hormonal que concluye en un aumento de los estrógenos en la mujer sucede por distintas vías. A veces solo hay una causa y, otras veces, la combinación de factores es la culpable. Entre las situaciones más frecuentes podemos mencionar las siguientes:
- Baja progesterona: la progesterona es otra hormona sexual importante en el sexo femenino. Para que un embarazo se concrete y se sostenga, es necesario que la misma esté presente en cantidades adecuadas. Si su nivel no es suficiente en la sangre, no puede contrarrestar a los estrógenos, y estos últimos se elevan por encima de lo deseado. Es un cuadro bastante habitual en el síndrome del ovario poliquístico.
- Falta de eliminación: los estrógenos altos en las mujeres, a veces, se acumulan porque no se eliminan por la orina y por el tubo digestivo.
- Aumento en la incorporación externa: hay estrógenos que se insertan al cuerpo desde vías externas, muchas veces sin que sepamos que están presentes allí. Es el caso de las hormonas que se emplean en el crecimiento de animales de consumo, las cuales son luego ingeridas por los humanos. Del mismo modo, ciertos productos de higiene y cosmética contienen hormonas en su composición.
Síntomas del hiperestrogenismo
Los síntomas de los estrógenos altos en las mujeres oscilan entre signos banales que no deberían preocupar hasta situaciones realmente problemáticas que necesitan atención médica urgente. De todas maneras, siempre es preferible efectuar una consulta ante la duda, ya que los métodos complementarios permiten distinguir entre causas que no necesitan mayor atención y otras que requieren tratamiento inmediato.
La hipersensibilidad en los senos es una señal clásica del hiperestrogenismo. Esto sucede de manera cíclica en asociación a los días del ciclo menstrual y denota la reactividad del tejido glandular mamario a las hormonas. En general, no es indicativo de una patología de mayor cuidado.
Por otro lado, la aparición de bultos en los senos sí debe estimular una consulta. Podría tratarse de un tumor productor de hormonas o de una reacción más concentrada de la glándula mamaria frente al exceso de estrógenos. En dicho caso, estas tumoraciones pueden doler demasiado, incomodar en el uso de la ropa e inflamar ganglios cercanos.
El aumento de peso se enmarca en síndromes más grandes, con otros signos acompañantes. No se puede decir que los estrógenos elevados en la mujer sean los únicos causantes de obesidad, pero sí favorecen la acumulación de lípidos si se combinan con bajos niveles de progesterona, en un síndrome de ovario poliquístico, por ejemplo.
Las alteraciones de los ritmos circadianos, por supuesto, no son menores. Al tratarse de una hormona relacionada a los ciclos del organismo, sobre todo en el sexo femenino, es esperable que su desbalance impida la consecución de regularidades. Esto aplica para el sueño y para la menstruación. En el hiperestrogenismo suele haber insomnio y metrorragia, que es el sangrado vaginal fuera del período esperado, según las fechas.
¿Se puede hacer algo para tratar los estrógenos altos en las mujeres?
Se puede elaborar un plan de tratamiento para los estrógenos altos en las mujeres, pero para eso es preciso tener un diagnóstico adecuado. La causa del hiperestrogenismo debe certificarse con métodos complementarios, de manera que se propongan abordajes para la etiología y no solo para descender las hormonas con una modalidad artificial.
Se realizarán cirugías si es necesario extirpar un tumor productor de estrógenos o medicamentos en el caso de los ovarios poliquísticos. De la misma manera, el uso de la dieta está indicado para reducir la pérdida de los metabolitos por la mucosa intestinal, al tiempo que se prefieren los alimentos con menor contenido hormonal por su condición de ultraprocesados.
